Cuando llegan los momentos de incertidumbre y  es difícil definir un eventual rumbo del activo según los criterios fundamentales, nos salva el análisis técnico. Cuando tuvimos el dilema sobre el consensus de bajar el límite de extracción del petroleo crudo y los precios que tocaban cada vez un nuevo mínimo, el indicador Ichimoku Kinko Hyo mostraba la tendencia de fortalecimiento de la moneda canadiense frente al dólar de Estados Unidos. Parecía poco creíble, ya que la economía canadiense dependía mucho de los precios del oro negro.

Desde 18 de febrero cuando el par dólar estadounidense / dólar canadiense cruzó la nube Ichimoku, era bien claro que estamos a punto del nacimiento de una nueva tendencia, en nuestro caso bajista. La confirmación del pronóstico la obtuvimos después del rebote de 24 de febrero del límite inferior de la nube, línea Senkou Span B que indica la tendencia a largo plazo. A pesar de que la situación con petroleo sigue siendo complicada, tenemos una clara tendencia bajista en el par dólar estadounidense / dólar canadiense, en la cual el dólar americano pierde su valor frente a la divisa canadiense.

El consejo comercial puede ser lo siguiente:  abrir las posiciones cortas, usando los rebotes de las líneas Tenkán y Kijún que nos indican las tendencias de corto y medio plazo respectivamente.